6.2.07
de antología loc(u)al
Así que compré el de Los mejores poemas mexicanos 2006. Muy emocionada leo mi ficha biográfica: (Ciudad de México, 1966) Estudia filosofía en la UNAM. Lo cual también puede leerse así: la pobre, además de que es malo su poema, sigue estudiando a sus 41 años... Lo cual me recuerda que tengo que irme a dar de baja de la UNAM. Lo cual me recuerda que tengo que bañarme antes de salir de casa. Lo cual me recuerda que hace un frío de la chingada. Lo cual -no sé por qué- me recuerda que Descartes escribía "sentado frente al fuego". Lo cual me recuerda que Platón quería botar a los poetas. Lo cual acabo de entender: ¡era por su demoniaca intuición numérica! Nótese: mi poema aparece en la página 83, que es el año en que nací. Luego, en el año en el que nací pusieron 1966, lo cual significaría que tengo 17 años de más. Y 17 eran los años que tenía cuando fui a Brasil y escribí ese poema. Freaky, ¿no? Luego pensé que, si hiciera mi propia antología de poesía, en contraste con el título pomposo, le pondría de epígrafe eso que dice Chito que dijo Bolaño: Los poetas mexicanos son muy buenos anfitriones y muy malos poetas. Cabe mencionar que mientras nos lo citaba, Chito -todo rey en la feliz cocina que comparte con Alicia- cortaba aguacates, y Luis, también poeta antologado, picaba cebolla. Yo, que a mis 41 años ya no estoy para cuchillos, exprimía naranjas. Lo cual me recuerda que no hay nada para desayunar en mi casa, lo cual se vuelve particularmente trágico cuando pienso en ese desayuno oaxaqueño que, todo localismo poético aparte, nos quedó de antología.
 
dijo Laia Jufresa en punto de las 10:30 ¤