28.11.07
afuera como adentro
san miguel de allende. miércoles (dicen. pero huele a domingo). llueve a ratos, en diagonal, casi en silencio. también hay sol. quizás la lluvia no se escucha por culpa del mozart del duende. espero el arcoiris obligado, como una promesa, pero no llega. el cielo me hace trampa. me como un dátil. mi madre se disputa con su vieja computadora, o con su investigación, no sé, pero habla sola. yo no avanzo. quizás si no me escucho, pienso, es por culpa de lo que no escribo. un par de perros pintos me miran. exigen amor.

actualización del post: san miguel de allende. aún miércoles. un par de horas/cuartillas más tarde, se suscitó la siguiente conversación:

laia: má, ¿me vas a comprar cigarros?
duende: ¡te voy a tupir tu copete!
 
dijo Laia Jufresa en punto de las 17:15 ¤ 6 posdatas
26.11.07
literal
a veces imagino que estoy libre de neurosis. luego releo un texto que ya entregué y me HISTERIZA encontrar un doble espacio entre dos palabras. (mis neurosis son textuales)
 
dijo Laia Jufresa en punto de las 13:17 ¤ 6 posdatas
23.11.07
a fact
nadie entiende al cien la expresión "instintos homicidas" hasta que su vecino compra (y deja encendidos 24/7) una serie de foquitos navideños con música de temporada.
 
dijo Laia Jufresa en punto de las 12:46 ¤ 8 posdatas
22.11.07
meme
(((Éste es un meme. O sea un jueguito que otro bloguero te enjareta. Acá había que contestar a la pregunta "¿Cómo sería tu mente si fuera una morada?")))

Si mi mente fuera una morada. Si mi mente estuviera organizada por cuartos. Si tuviera escalera, porche, esquinas. Si le colgaran móviles y hamacas. Si pudiera recorrerse encendiendo luces y cerrando puertas. Si pudiera cerrarse. (Si mi mente pudiera cerrarse, otro gallo nos cantara.)

Si mi mente fuera una morada tendría la guitarra de mi padre (es decir, la música de la guitarra de mi padre) en la sala, cuando cae la tarde. Tendría todas las plantas que mi madre siembra y su miel, aunque no sus abejas porque yo en mi mente no quiero zumbidos ni piquetes. Tendría una terraza donde cada amigo mío tendría su silla. Y una enorme chimenea, porque las chimeneas entienden ese asunto del calor humano que a la mente, con frecuencia, se le escapa.

Si mi mente fuera una morada tendría un tobogán inflable de emergencia, como de avión, para poder mandar a deslizarse muy lejos todas esas pendejadas que a ratos la ensombrecen.

Si mi mente fuera una morada tendría calabozo. Evidentemente.

Simimentefueraunamorada
habría
espacio.

Si mi mente fuera una morada sería blanca. Colgarían de las paredes los batiks de la China y los payasos de Pacos. Habría muebles con millones de pinceles, un cuarto para pintar y un cofre del que yo tendría las llaves. (Si mi mente fuera una morada yo sabría dónde dejé las llaves.) Y con ellas podría desentrañar en qué jodido estante dejé la Historia alguna vez memorizada, las capitales, los viajes, las direcciones, la infancia. Si mi mente fuera una morada le pondría tapete rojo a Mme Memoria, y le prohibiría marcharse.

Si mi mente fuera una morada yo aprendería a trabajar de día: desde las 7 los engranes girando chin-pun-cuas: el baño está limpio, en el estudio se gestan libros, en la cocina los guisos huelen a buenos chistes. Si mi mente fuera una morada a las 5 se bebería el te de las 5, y todo lo demás se detendría. Luego una siesta precisa, y yo tranquila.

Pero mi mente no es ninguna morada. Le fallan la tubería, la iluminación y las manijas. Reverdece a la intemperie. Sufre de otoños. Está mojada. Mi mente, para bien o para mal, tiene huecos y goteras. No puede cerrarse: está perennemente en obra negra.

Por lo tanto, rolo el meme.

Va para Andrómeda, porque no ha posteado y eso me enfurece, para El Oficín, que va a tener que hacer el meme en tuiter (y no puede gastar caracteres en quejarse de que me lo fusilé tres párrafos arriba), para Karlatone, que sabe de mudanzas y para Santiago, que sabe dónde va el terciopelo si lo que se quiere es bailar. No rajen.
 
dijo Laia Jufresa en punto de las 01:16 ¤ 9 posdatas
21.11.07
otro biutiful batik by lady c.
 
dijo Laia Jufresa en punto de las 12:39 ¤ 8 posdatas
15.11.07
teología de balcón
el único pedazo de verdad que alberga todo el discurso blablasero de la reencarnación, es que yo en otra vida fui una lagartija.
 
dijo Laia Jufresa en punto de las 13:26 ¤ 6 posdatas
14.11.07
y dice...
Por aquí van edificándose arsenales de intimidad hipercolmada
(t. avedoy)

 
dijo Laia Jufresa en punto de las 09:09 ¤ 6 posdatas
12.11.07
desdeventana
A cierta hora todo mi tráfico está en pugna. Reposo. No conozco más método que lo estático. Soy la vía pública. Todo el que me transita paga tarifa: me disimulan. Son los maniquíes. Son ellos la vitrina. Yo soy el bloque. Soy de piezas tan dispares que va mejor fundirlas. (Que se me recuerde en una foto aérea -en un borrón- como a un yunque.) Tengo corcholatas incrustadas en la espina y un millón de colillas me adolecen sin anecdotario. Tengo el musgo repentino del adoquín y la flor me florece en los rincones más insospechados. Tengo faroles y grietas, gatos muertos, monedas caídas de la suerte. Cuando los panfletos me tocan, las causas mueren. O se re-editan. O se arrepienten. No tengo prisa. La prisa de los otros me transcurre. Sin comprenderla, la envidio a ratos. Miento. Yo soy reposo, raspo sólo al que tropieza, al que se quiebra. Yo soy la calle, la llaga abierta.
 
dijo Laia Jufresa en punto de las 23:01 ¤ 18 posdatas
9.11.07
deformación profesional
Hoy fue el día mundial del urbanista. Acabo de colgar con Alejandro -el único urbanista que frecuento- y me contó de un sueño que tuvo antier. Tenía cerrada la garganta, tanto en la realidad como en el sueño y según él por haber pasado muchas horas platicando con Valeria y conmigo, que fumamos mucho. En el sueño, Alejandro veía los conductos de su garganta como calles, como calles blancas en un plano, pero a la vez sabía que eran calles ya habitadas y que él tenía que reacomodarlas -con todo cuanto contenían- para que el aire pudiera volver a pasar y que, sólo así, él podría volver a respirar.
 
dijo Laia Jufresa en punto de las 01:33 ¤ 12 posdatas
8.11.07
2006
no pretendo que nadie se acuerde, pero poquitos días después de abierto este blog, presentamos el libro de tere en tijuana y prometí fotos que nunca llegaron. ahora salió el texto en la revista metapolítica (cómprenla en su kiosko más cercano, es un número lleno de nuevasbuenasvoces, neto) y las fotos, finally, llegaron ayer. po, que las tomó casi todas, es famoso por tomar buenas fotos, pero yo nunca había visto fotos que develaran tan cabrón mi personalidad:
laia as always:
buceando en la mocla / babeando frente a fauna y flora

paisajes y amigos, casi nada más importa

excepto quizás leerles el iching

(nótese el escepticismo de po...)
y ahora un clásico:
laia acaparando el pretzel

huyendo con el pretzel

(tere acabó tirando las muletas, alcanzándome, derribándome, y acaparando el pretzel,
es igual que yo, por eso nos queremos tanto)
y bueno...

huyendo
 
dijo Laia Jufresa en punto de las 18:50 ¤ 4 posdatas
6.11.07
juliana
será en una tarde lejana, cuando esté vieja y la piel me huela a pastilla y la belleza sea, forjada del dolor y de por dónde me cojeó o me asaltó la vida, y lo que dejó adentro. sólo entonces me haré ese té: abriré una libreta limpia, empuñaré una bic, y si pasa por ahí algún nieto se reirá, porque las plumas serán cosa del pasado.

yo al nieto lo miraré pasar con insólita indiferencia, mágicamente desprendida por un rato del amor babeante de las abuelas, brillante y egoistamente aferrada sólo a lo que en mí es imperante, a un algo que hay que escribir, y será tu nombre.

estaré vieja, podré sacarme en letras -como una confesión, como un testamento- el por qué dentro del hormiguero inmenso de gente que conocí, y dentro de la colmena más reducida y más blanda de la gente que quise, saltaste siempre tú como un referente, como uno de Los Personajes.

estaré vieja: sabré de cierto que los adjetivos sobran.

estaré vieja: habré encarnado la hermosa lección de lo simple.

estaré vieja y escribiré simplemente: yo tenía 16 años y me dolía todo lo habitado, por turnos: la ciudad que desconocía y el cuerpo que me cambiaba. una mujer, entonces, atando cabos desde el otro lado del oceano, me dio fuerzas. y escribí. y quizás hice eso de mi vida por esa mujer, que no contenta con haberme señalado como sin querer y al paso lo que se convertiría en mi camino, siguió durante años acertando golpes en mi haber. eran pocas y atinadas sus palabras: decían lo real, hacían resurgir, cada vez, de entre toda planicie y todo atolladero, lo importante.

para esa tarde de lucidez senil falta mucho, porque yo no estoy vieja todavía, sino apenas armándome.

pero estoy armada.

(estamos: sabemos lo que hay que empuñar)

seguimos.
 
dijo Laia Jufresa en punto de las 12:44 ¤ 4 posdatas
5.11.07
shit happens
 
dijo Laia Jufresa en punto de las 11:38 ¤ 4 posdatas
1.11.07
estar en casa
es volver a ser
el soberano absoluto
de los decibeles
 
dijo Laia Jufresa en punto de las 13:39 ¤ 7 posdatas